jueves, 13 de noviembre de 2008

DERECHOS Y OBLIGACIONES, POR FAVOR

Las llamadas a la oficina del Defensor del Profesor han aumentado un 50 por ciento el último año.
Los profesores denuncian, cada vez más, agresiones cometidas por los padres.
De hecho, casi dos de cada 10 agresiones contra los profesores las cometen los progenitores.
Los insultos, las amenazas y las agresiones físicas están a la orden del del día.
Cada día 10 llamadas y, evidentemente, no están todas las que son.
Cualquiera diría que unos (los padres) y otros (los alumnos) tengan que resarcirse de otras épocas en las que eran los profesores los que caneaban a los estudiantes. Me recuerda demasiado a otras situaciones que estamos viviendo y que podríamos calificar de ajuste de cuentas con la historia, cuando no de venganza con retardo. Los homosexuales o las mujeres queriendo sacudirse siglos de sometimiento a base de imponerse por qué sí. Vencidos que quieren ser vencedores a costa de imponer una no justicia. Nacionalistas que, tras exprimir la burra, quieren deshacerse de ella como si fuese la causa de todos sus males.
En este caso, es un poco más dramático porque da la impresión de que los ahora padres quieren devolverle ese cachete, esa bofetada, al maestro de entonces, en el profesor de hoy que, probablemente, sufrió los mismos castigos que él. Como para no entender nada, salvo que el profesor se convierte en un punchimbol obligado a aprobar a los becerros sin molestar demasiado.
Pero no sólo eso. Ayer mismo hemos conocido una historia de esas que me pone los pelos de punta. Por dos razones, una porque demuestra que esta sociedad tiene la firme voluntad de idiotizar a nuestros menores como si de ello fuésemos a sacar algo en limpio para el bien común. La otra, porque esta tendencia empieza a extenderse a otros ámbitos, si cabe, más peligrosos.
Un juez acaba de reconocer que un crio de dos años tiene derecho a una pensión mensual de 3.500 euros. Agárrense los machos y vuelvan a leer. 3.500 euros al mes para un mocoso de dos años. No contento con eso, y por si quedaban dudas, su señoría no tiene empacho en aclarar que la razón de tal cantidad de moneditas pal nene viene dada porque no tiene por qué renunciar a la asistenta, a la ropa de marca cara, a los regalas tipo play station y a los lujos que le serían propios si sus papis no se hubiesen separado.
Pongo por delante, para que nadie me llame torticero, que el papá del agraciado ha confirmado unos ingresos que rondan el millón y medio de euros al año. Dicho lo cual, si el papá tuviese unos ingresos de 600 euros mensuales, mucho más próximo a la realidad del español medio, a que el señor juez no hubiese tenido los huevos necesarios para decir que el niño se tenía que conformar con 200 eurillos. No, seguro que no. Le habría dicho al buen hombre, "búsquese la vida, trabaje un poquito o un muchito, pero al niño le pasa usted 800 ó 900 euros que es lo que necesita para vivir.
Pero, sobre todo, volvemos a lo que ya he dicho alguna vez en este mismo lugar. Donde coño está escrito que los niños sólo tienen derechos. Cuando, en que momento llega la hora de imponerles obligaciones. Con profesores reducidos a esparrings mal pagados, me quedo sin respuestas.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Partiendo de la base de que estoy en (casi) todo de acuerdo contigo, te diré que lo de la pensión de los "tres quini" debe ser un logro del abogado/a de ELLA. Y no tengas la menor duda de que el dinerito lo gestionará la madre y aquí paz y después gloria. Caerá una play y poquito más...

rot dijo...

Tampoco te creas que tengo muchas dudas a ese respecto. Pero, en ese caso, espero que el juez generoso actúe contra la mamacita.

Unknown dijo...

UY! Olvídate... si a ls jueces se les escapan los asesino!!!! Crees que van a controlar los gastos de una madre que le ha sacado "tres quini" al marido??? Ni de coña... Y te digo más... que se joda el macho!! A lo mejor se ha ido con otra y ELLA ha dicho:
-Te vas a enterar.
O en vulgar:
-Te vas a cagar!!!

PUES ESO DIGO.