jueves, 16 de agosto de 2007

YO NO TENGO CURVAS, TENGO ARISTAS


Vuelvo de vacaciones y me encuentro con la reconfortante imagen de Keira Knightley en la nueva campaña de Chanel. La primera vez que vi a esta chica fue en Love Actualy y me pareció una muchacha la mar de atractiva, la película ayudaba la verdad. Pero a partir de ahí, siempre que la he vuelto a ver me ha parecido demasiado... delgada. Por eso, al ver la foto de la nueva campaña de la conocidad marca francesa me he sorprendido. La Knightley vuelve a estar... apetecible, he pensado.

Pero sólo ha sido un espejismo. Unas horas después, leo que la propia actriz reconoce que las curvas del anuncio no son suyas. Que el Photoshop ha vuelto a jugar su papel. "Yo no tengo esas curvas, tengo aristas" a venido a decir. Mi gozo en un pozo. Pero, pensandolo bien, me he dado cuenta de que algo parecido está ocurriendo en el mundo que nos rodea, todo este verano. Extraño verano por otra parte.

Está siendo éste un verano de demasidas aristas. Miguel Sanz empieza a cumplir lo pactado, en la calle Ferraz en julio y pide un poco de margen a Rajoy. Dejame respirar, le ha venido a decir. Zapatero, que con tanta habilidad reformó el Gobierno dando entrada a Carmen Chacón, se deja comer el terreno en Cataluña entre las quejas de los siempre sufridos usuarios. Josu Jon prepara su catálogo de señas (cual experto jugador de mus) ante la partida que el PNV vivirá con la llegada del nuevo año. La economía mundial muestra su cara más angulosa en forma de dientes de sierra en las bolsas y otros indicadores.

Pero, ¡qué no cunda el pánico! Bill Gates ya está perfilando una versión avanzada del Photoshop para que esas aristas se conviertan en curvas atractivas y los siempre sufridos ciudadanos no nos demos cuenta de nada.

No hay comentarios: