Incluso los amos y amas de casa más descuidados tenemos un costurero en donde guardamos hilos de colores que nunca utilizamos, agujas que nunca encontramos, alfileres que no sabemos utilizar,... cosas más o menos inservibles que nos creemos en la obligación de tener a mano, no sabemos muy bien por qué. Hoy es la primera vez, pero no será la última, en la que voy a tratar algunas cosillas dispares y descolocadas. Cosillas que se agolpan en este blog,... no se muy bien por qué.
Francia hiper activa.
Es evidente que Nicolas Sarkozy ha supuesto una pequeña revolución en Francia. Tiene algo que ver con el fuerte contraste respecto de su antecesor. Mohíno, paralizado, en la recta final de su laaaaaaarga carrera, Jacques Chirac se ajustaba perfectamente a esa denominación tan americana de "el pato cojo". No hacía, casi no dejaba hacer, ni estaba, ni se le esperaba ni na de na. Y Sarkozy llegó con bríos, demasiados quizás, y marcó un fuerte cambio de tendencia. Una tendencia a la que se han sumado muchos en el país y que podría ser el síntoma de que nadie quiere quedarse fuera de los medios aunque no sepan muy bien para qué.
Todo son propuestas, ideas, proyectos,... incluso iniciativas a nivel internacional y global. Una hiper actividad que ha acomplejado a no pocos líderes internacionales, en un primer momento. Es sabido que los comportamientos, cuando tienen voluntad de perdurar en la historia, deben amoldarse a los principios de la propia historia. Uno de ellos, al menos según mi criterio, es que las acciones poco pensadas, más impulsivas, suelen tener difícil encontrar un hueco en ese tortuoso recopilatorio que es la historia. Algunos periodistas se empeñan en decir que los periódicos son la antesala de la historia. El primer paso para pasar a la historia. Yo me inclino más a pensar que cuando algo o alguien irrumpe con demasiado e inesperado ímpetu en la prensa, tiene muchas papeletas para ser devorado por la historia.
Sarkozy, siempre que ha alcanzado un puesto político de relevancia, ha sido "buen amigo" de los medios de comunicación. Es más que posible que la historia lo devore hasta el olvido. Veremos.
Vivienda por derecho.
Vaya por delante que soy favorable a que se cumpla la Constitución, aunque suene a obviedad. Y vaya por delante que, por lo tanto, soy favorable a que todos los españoles tengan una vivienda digna. Pero con este tema, como con otros muchos, se aplica una demagogia insufrible, más cuando son los políticos los que se meten en el tema y más, cuando estamos en periodo electoral.
La última ocurrencia (penúltima sería mejor decir) nos viene de la Junta de Andalucía. Una ley para que todos los andaluces tengan derecho a una vivienda. Para empezar, cada vez que se habla de una nueva ley para garantizar un derecho me echo a temblar. Suele ser equivalente el primer paso para vender una burra, ganar un necesario puñado de votos, generar la consabida polémica y punto. De solucionar el problema, nada de nada.
En este caso concreto, y tirando de la inevitable demagogia, me pregunto: ¿una casa para cada persona?. Y pienso, en el caso de un matrimonio ¿pensamos en dos casas, una para ella y otra para él?. No claro, son un matrimonio, una unidad familiar, y por lo tanto les corresponde una sola casa. Pero la Constitución dice "todos los españoles..." (artículo 47). En todo caso, demos por bueno una casa por unidad familiar. Pero ¿cómo medimos una unidad familiar?. ¿Una pareja de hecho, que no haya formalizado sus papeles, lo es?. Porque, en ese caso, podemos empezar a encontrarnos con unidades familiares que prefieren no formalizarlo para tener dos casas, por ley. Vaya, vaya.
Y los hijos. En España, a los 18 años se asumen todos los derechos. ¿Cada chico y chica que cumplan la mayoría de edad van a tener derecho a una casa o habrá un plazo para alcanzar tal estatus?. ¿O se establecerá un cupo por unidad familiar?. Y ¿cuándo se pierde ese derecho?. Porque, claro, en España es muy común que los abuelos y abuelas se vayan a vivir con los hijos. En ese caso pierden el derecho o lo mantienen. Además, el proyecto de la Junta de Chaves habla, indistintamente de propiedad y alquiler. Pero todos sabemos que no es exactamente lo mismo. ¿Cómo vamos a discriminar ese factor?.
Se me ocurren algunas maldades más pero, como apunte, creo que vale. Más fuegos electorales de artificio. Y a nadie se le retuerce el gesto. Bueno, al tío Solbes no le ha gustado mucho pero, ¿quién tiene en cuenta lo que dice el bueno de Solbes?. Ese ministro repetido, el único caso de nuestra democracia que ha sido ministro de la misma cartera en dos gobiernos distintos, con dos presidentes distintos, con idéntico éxito reconocido, y que todavía seguimos cuestionando. Vaya, vaya.
Los que siempre vuelven.
El otro día hablaba de la gente del cine. Y apuntaba entonces que muchas de esas personas tienen una extraña habilidad para reaparecer en nuevos proyectos cuando necesitan dinerito pero "venderlo" como si fuese una necesidad creativa o, incluso, una muestra de generosidad para con esos espectadores que no podemos vivir sin "su arte". Algo parecido se podría decir de los músicos, de los humoristas e, incluso, de muchos periodistas.
Este año estamos siendo testigos de una gira que, a primera vista, tendría muchas papeletas para resultar atractiva. Dos tíos de tanto tirón y extensa producción como Sabina y Serrat han unido fuerzas, ganas y creatividad. Y parece que los conciertos funcionan razonablemente bien. Sin embargo, los seguidores de uno y de otro, pero también los neutrales, no se quitan la sensación de que uno está echándole una mano al otro. Quizás los últimos años de forzado silencio de ambos abonan esta sensación. Quizás, el hecho de que ambos han sobrepasado una edad, también ayude a esa sensación.
Hoy mismo, leo en la prensa que Pedro Ruiz vuelve a la televisión con un programa. Vaya por dios! y no puedo quitarme de la cabeza que hace muchos años, este tipo creo un formato tan exitoso como Estudio Estadio para la TVE de la UCD. Luego parodió a diestro y siniestro en aquellos programas multiusos, también para TVE, pero esta vez del PSOE. Las críticas de la oposición fueron furibundas y con muchos peldaños por en medio, Ruiz terminó reciclando los tradicionales programas de entrevistas en una Noche Abierta que resultó exitosa y modélica en la TVE del PP, con no menos críticas de la, por entonces oposición. Siempre ha sido un personaje polémico. Siempre ha estado tanto y más preocupado de los dineritos que de lo que hacía. Y ahora desembarca en Telemadrid con un nuevo espacio de humor.
Y yo, malvado de mi, no puedo dejar de pensar en que lleva mucho tiempo fuera de los medios y que, quizás, sólo quizás, la bolsa no está en el nivel que Pedro considera adecuado. Y nada más sencillo que dar un toquecito aquí y otro allí y zas! tenemos programa y, sobre todo, moneditas lustrosas que echar a la bolsa.
Yo he disfrutado bastante con muchas de las cosas que ha hecho Pedro Ruiz. Todavía conservo una casete con sus imitaciones de Fraga, Suárez, Carrillo, Emilio Romero,... y me rio, y las recuerdo mucho. Y sus entrevistas, manos de Quinn por en medio, me parecían de lo mejorcito que se veía por entonces en la tele, a pesar del relamimiento del presentador en demasiadas fases del programa. Le deseo lo mejor. Pero no me puedo quitar de la cabeza que Pedro es... de los que siempre vuelven.