martes, 3 de agosto de 2010

POR NO ESTAR CALLADOS

Vamos a ver si yo me aclaro. Esperanza Aguirre tiene que volver a ganar, por mayoría absoluta, para poder seguir gobernando en la Comunidad de Madrid. En principio, el PSOE tiene suficiente con evitar esa mayoría absoluta para evitar que Aguirre siga en la Puerta del Sol. Sólo si UPyD entrase en al Asamblea de Madrid (algo no del todo descartable) esta ecuación se iría a hacer puñetas.
Teniendo en cuenta que el PSOE lleva 15 años en la oposición en la Comunidad de Madrid, es de suponer que ha tenido tiempo más que de sobra para aprender bien su papel y su labor. Pero en estos 15 años le ha pasado de casi todo y han pasado casi todos por el potro de tortura. Ahora llevan 3 años con un tipo que si se hubiese concentrado en aplicarse a la labor de oposición podría haber tenido opciones.
Pero lo cierto es que ha estado más entretenido en hacer otras cosas que a los ciudadanos les importan más bien una higa. Y a falta de 9 meses para las elecciones a todos les entran las prisas. Pero mis dudas no iban sólo por ahí.
Suponemos que Trinidad Jiménez, como dicen las encuestas, es una de las ministras más valoradas del Gobierno. Eso, tampoco es decir mucho si tenemos en cuenta que es un gobierno de trapillo. Pero es de las más valoradas. Se supone, pues, que está haciendo más o menos bien su labor. Y algún genio ha decidido que es el momento de meterla en una trituradora para que deje de hacer bien lo que está haciendo bien por el bien de todos, para que haga lo que cualquiera podría hacer en beneficio de nadie. No lo entiendo.
Si las cosas le saliesen de cine a la Trini tendría una opción de formar gobierno con IU. Ahí, partimos de la base de que habría sido elegida por la santa voluntad del ministro de Deportes, ZP, tendría que lidiar con las familias ansiosas del socialismo madrileño. Esas familias esperan desde junio de 2003 para hacer el reparto del pastel que entonces quedó interruptus por el tamayazo. A esas familias se ha sumado alguna otra y, además, habría que hacer hueco a las familias de IU que tampoco es manca la cosa.
Si queremos pintar mal el panorama podemos incluir la variable de UPyD y vereomos que la posibilidad de cuadrar las piezas son casi nulas. Y pese a todo hay quien piensa que se puede hacer y que es factible. Y yo sigo sin entender nada. Alguien muy acostumbrado a hacer campañas (a favor y en contra) a gestionar gobiernos y a desmontar enemigos me dijo una vez que lo primero que hay que hacer para sacar a Esperanza Aguirre de Sol es darle duro, siempre, sin miramientos y donde más le duele. Y, al mismo tiempo, preparar la casa propia para cuando llegue el momento de ocupar el puesto que quedaría vacante.
El PSOE lleva 15 años sin hacer ni una cosa ni la otra en la Comunidad de Madrid y pretende fiarlo todo a la buena de Trinidad Jiménez. ¿Se puede ser más torpe? Si no fuese porque lo sabemos todos me negaría a pensar que en esa estrategia están Zapatero, Blanco y Chaves. Claro que la última implicación directa de Blanco en una campaña (la de las autonómicas de Galicia) ya sabemos como terminó.
Como estas líneas no llevan a ningún sitio me voy a permitir hacer un planteamiento. El que yo haría si tuviese potestad para ello. Dejaría presentarse a Tomás, con todo el apoyo posible. Trataría de lograr el mejor resultado en las presentes condiciones, que no será mucho. A continuación le daría una salida honrosa y pondría a un equipo serio de verdad. Y empezaría con la descrita estrategia inmisericorde de recortarle el terreno en todos los ámbitos a Aguirre. Y en esas condiciones, tal vez, dentro de 4 años, el PSOE no tendría que estar pensando en una estrategia a 12 ó 16 años, que es el panorama que tiene ante sí en este 2010.