Las reacciones a la sentencia hecha pública ayer por la Audiencia Nacional entraban dentro de lo previsto. Sí, nuestros políticos son previsibles (casi tanto como pesados) y esta vez no iba a ser una excepción. Sí hay un elemento que me ha llamado la atención. Después de todo lo que ha dicho el PP de la actuación de los policías, de los fiscales, de la instrucción sumarial,... (alguien no recuerda que fue el propio Rajoy quien dijo que la instrucción estaba viciada y que habría que anularla). Después de las sombras que ha sembrado (por acción, colaboración u omisión) sobre la actuación de nuestros servicios secretos y de los de otros países. Después de todo y tras 3 años y medio mareando (y mucho, se lo puedo asegurar de primera mano) la perdiz, se acuerdan ahora de que fue su Gobierno, el que presidía José María Aznar, el que efectúo las primeras detenciones. Especialmente relevante la de Jamal Zougam que ha sido el único condenado como autor material.
Se han acordado ahora. Pero, ¿en qué estaban pensando?. Y, sobre todo, ¿por qué se acuerdan ahora?. ¿Otro clavo ardiendo al que agarrarse?. Sí señores, ustedes dirigían este país aquellos días imposibles, aquellos días que agolpan recuerdos en la cabeza de muchos de nosotros. Yo me acuerdo, bastante bien, de las ruedas de prensa de Ángel Acebes. De como ese ministro, del que tenía un gran concepto, fue envejeciendo por minutos, enfermando físicamente en cada rueda de prensa (y fueron muchas). Nunca un Ministro de Interior había sido sometido a tal escrutinio público, a unas condiciones tan duras, y Acebes lo acusó; era normal. Dejando al margen todo lo que ha dicho y hecho después, algún día habría que homenajear lo que hizo. Dio la cara en todo momento y se la partimos todos bien partida. Todavía busca algún pedazito.
Sí, insisto, fueron ustedes. Pero el hecho de que sea ahora cuando se acuerdan es mala excusa. Si la acción de la policía estaba cubierta de dudas hace solo unas semanas, también eran ustedes entonces los responsables de esa policía. Era su policía y hasta hace bien poquito, les acusaban de haber trabajado al servicio del Partido Socialista. Se quejaron amargamente de haber sido engañados por topos socialistas en las comisarias (y todavía se quejan de eso). Pero ahora se acuerdan de que fue con un Gobierno del PP cuando se produjeron las primeras detenciones. Que sí, pero para lo bueno y para lo malo, señores míos. No sean ustedes hipócritas.
Algo parecido se puede decir de lo de la autoría intelectual, a la que ya me referí ayer. No se han cortado, los cualificados portavoces del PP en recordar que la red de Al Qaeda es tupida, variopinta, en células independientes, que colaboran, comparten personas y pueden interactuar, pero que también mantienen una cierta independencia. Es más, hace no mucho, leí un artículo en el que se decía que la estanquidad de esas células es cada día mayor, sobre todo, después del 11S. Pero aquí, en España, hay quien se empeña en buscar una autoría intelectual. Como si eso les fuese a dar alguna satisfacción secreta. No soy víctima del terrorismo (de ninguno) y se, perfectamente, que no me puedo poner en la piel de una víctima, pero ¿de verdad es tan importante saber el por qué asesinan a un ser querido?. Me cuesta entenderlo. Si hubiesen matado a alguien cercano a mi, no me interesaría demasiado el por qué. Sí lo sé, mejor. Pero lo prioritario es que trinquen al asesino y lo enchironen de por vida. Insisto, la motivación de los terroristas no me interesa, no me vale para nada.
Por último (al menos hoy, porque seguro que volveré sobre este tema) quisiera apostillar algún error de bulto de esos que empiezan a proliferar. No es del todo correcto decir que El Egipcio ha sido absuelto. Ha sido absuelto del delito de inducción (de ser el cabecilla) pero no de pertenecer a una organización terrorista. La sentencia considera que lo es. El problema es que no se le puede condenar por eso, porque ya está cumpliendo condena en Italia por ese mismo delito. ¿Se acuerda alguien de la impunidad con la que se movió Josu Ternera por España durante años por la misma razón?. Pues eso. Que poco cuesta hablar de oídas, sin leer los papeles y olvidándose de lo que se dijo, no ya ayer, sino hace 5 minutos.